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Una madre coloca la silla infantil a su bebé, que es de uso obligatorio.

El uso de la silla infantil es obligatorio para los niños con una estatura igual o inferior a 135 centímetros. Una norma de la Dirección General de Tráfico (DGT) que en los largos desplazamientos de camino al destino vacacional en verano se vuelve crucial para mantener la seguridad de los más pequeños. Este sistema de retención infantil no puede faltar cuando hay bebés en el coche.

Al igual que el cinturón de seguridad para el resto de acompañantes, no llevar la conocida silla del bebé supone una multa de 200 euros y ahora con la nueva ley de Tráfico la retirada de4 puntos, en lugar de los 3 de antes. Además, debe estar homologada por Tráfico. Aunque la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha detectado tras su análisis que dos de ellas que están homologadas han presentado fallos de seguridad en las pruebas. Por tanto, los dos modelos de sillas de bebé para el coche no seguras, según la OCU, son:

- La silla Urban Kanga Uptown TV107. Se trata de un modelo indicado para niños de 9 a 18 kg de peso, aproximadamente de 1 a 4 años. Señalan que no superó la prueba de impacto lateral y que en su composición hay materiales tóxicos.

- El modelo Walser Child Seat Noemi para niños más mayores, de unos 4 a 12 años, tampoco ha superado la prueba de toxicidad.

A pesar de que son sillas autorizadas para su uso, según la OCU, sus pruebas son más realistas y exigentes que las que establece la normativa de la Unión Europea. En este estudio comparativo han realizado un crash test, con pruebas de impacto frontal a una velocidad de 64 km/h y de impacto lateral a 29 km/h, para evaluar las fuerzas y aceleraciones que soportaría el cuerpo del niño, entre otros análisis. Además, aconsejan que para elegir la silla infantil más adecuada para el niño, debes prestar atención a su estatura, según la clasificación que prevé la norma ECE R129. Aunque antes se tenía en cuenta el peso del bebé y hay asientos que todavía usan este criterio.